Sí, la piel del hombre se distingue por ciertas especificidades que justifican cuidados adaptados:
- Es más espesa.
- Es más firme y más elástica.
- La secreción sebácea es más importante.
- Tiene un sistema piloso más desarrollado.?

Este gesto cotidiano provoca una verdadera abrasión cutánea.
Ya sea mecánico o eléctrico, el afeitado destruye en parte el film hidrolipídico; de allí una pérdida de la protección natural de la piel.

El vello encarnado es un problema muy frecuente.
Dos mecanismos entran en juego, con importancia variable:
? el corte de vello demasiado corto, por debajo de la epidermis, con penetración secundaria de la dermis por vía transfolicular.
? un vello demasiado largo que repica la piel por vía extrafolicular, luego de un corto trayecto exteriorizado en rizo/redondo.

Aplicar un producto de cuidado específico, por la noche, en las zonas concernidas.
? Por la ma?ana, utilizar un Gel de afeitado cuya textura sea envolvente y la espuma densa y untuosa responde bien a las pieles más exigentes.
? Aplicar luego un cuidado post-afeitado de una textura enriquecida o ligera, según se tenga piel seca o normal a mixta.

Sí. La sobre-infección afecta el folículo pilo-sebáceo. La mayoría de las veces, la bacteria causante es el estafilococo dorado (S. aureus).
El tratamiento consiste en :
? una higiene cuidadosa antes del afeitado (rostro y manos).
? un afeitado correcto, cambiando la lámina cada vez.
? la aplicación de antisépticos o antibióticos locales por la noche, luego de la limpieza y por la ma?ana, luego del afeitado.

Para facilitar el afeitado, preparar la piel humedeciéndola con agua tibia.
? Aplicar la espuma, el gel o la crema, en función del tipo de barba.
? Enjuagar bien y secar.
? Utilizar un cuidado post-afeitado para calmar la piel, regenerar los tejidos agredidos por la navaja y evitar los riesgos bacterianos.
? Se recomienda no utilizar productos con alcohol luego del afeitado.